Terrícola, no provoques a la Metrología.

Ayer 23 de Septiembre se cumplieron 22 años del accidente de la Mars Climate (https://elpais.com/diario/1999/10/02/sociedad/938815207_850215.html. Los errores de conversión en las unidades de medida que parece provocaron el fatal accidente, son más propios de la película El Astronauta protagonizada por el entrañable Tony Leblanc que de la NASA.

125 millones de dólares fue la factura que tuvieron que pagar los contribuyentes norteamericanos para sufragar esta loca aventura espacial. La única parte positiva de todo este asunto fue que desde entonces se inició un proceso de revisión que acabaría por elegir las Unidades del Sistema Métrico en vez de las del Sistema Británico. Lástima que tuviera que suceder un accidente de este calibre para tomar una decisión tan evidente.

Recientemente hubo una revisión del Sistema Internacional de Unidades (SI). En los tiempos que vivimos, sólo el hecho de poner de acuerdo a tantos países en algo ya es de celebrar. Si además, es uno de los inventos que más ha contribuido al progreso de la humanidad es para que lo celebremos cada vez que tengamos ocasión, a pesar de que a nivel industrial, la recién revisión del SI tiene poca relevancia. En este sentido, que la forma de materializar ahora el kg sea de un modo diferente tiene apenas impacto para una empresa Inyección de Plástico o Energía Eólica. Sin embargo, para el Terrícola de a pie, saber seleccionar las unidades de medida en un proceso industrial, medir correctamente las magnitudes físicas más relevantes y asegurar su trazabilidad metrológica, sí son aspectos que se deberían cuidar. La lección de la Mars Climate sí debe servir para ayudar a concienciar que el camino para mejorar la fiabilidad pasa inevitablemente por simplificar los procesos y poner de tu lado a la Metrología. O al menos no provocarla.

Autor: Sergio Extremera – Jefe de división FemtoCal
Edición y diseño: Juan Francisco Grijalva – Marketing y Comunicación .